Puedo contarte que llevó unos 6 años metido de lleno en la observación de los planetas y el cielo en general y he aprendido cosas geniales. Tengo una bitácora de observaciones que corresponden a los primeros años, cuando poco a poco fui descubriendo cosas. Partí en un principio con sólo binoculares y un pequeño telescopio que me fabriqué con unos lentes antiguos de un episcopio. Después me compré un tasco reflector de 114 mm que me llenó de alegrías. Sobre todo , cuando lo instalé por primera vez y ajustando el buscador y orientándolo en la línea de Jupiter, apareció el planeta maravilloso con cuatro lunas en sus costados. Fue algo jamás soñado, que ahora, después que el río se ha llevado mucha agua, me es algo cotidiano.
Más tarde decidí fabricarme un reflector y para eso le pedí al genio nuestro don Ricardo González, astrónomo afisionado, que me fabricara un espejo de 150 mm. Por supuesto que todo salió a la perfección, pero estuve como tres años, reparando y reparando errores, hasta que el telescopio "Ganímedes" 150 mm vió la luz. Va una foto de Ganímides y más adelante te contaré muchas otras cosas.
1 comentario:
y....? no escribiste nada mas acerca de tu pasión por la astronomía.
Nunca es tarde.
saludos,
Julio
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